Análisis 223
La dirección del Centro Nacional de Inteligencia se encuentra en situación de interinidad. Una dirección de los servicios de inteligencia no puede estar en interinidad, y si se ha llegado aquí es por una razón política. El objetivo de este análisis tiene por objeto ofrecer una serie de reflexiones sobre el enfoque político de los servicios de inteligencia.
La Ley Reguladora del CNI establece un mandato de cinco años, pudiendo ser renovado, como ha ocurrido con la anterior dirección a cargo del general Félix Sanz Roldán, que fue de julio de 2009 a 2014 y de 2014 a 2019. Diez años es mucho tiempo y agotar el segundo mandato sabiendo la fecha de salida, sin haber señalado una sustitución, manifiesta defectos a nivel del Poder Ejecutivo. Esta observación la haría cualquier consultoría de desarrollo de organizaciones.
Ante el vacío en la dirección, las funciones recaen en la secretaria general, Paz Esteban López. La noticia es que es la primera mujer al frente de los servicios españoles. Todavía no tiene el rango de Secretaria de Estado, porque el Gobierno permanece en funciones. Cabe preguntarse si un Ejecutivo que todavía no sabe cómo y con quién pactar para formar mayoría parlamentaria tiene claro para qué sirve un servicio de inteligencia, si realmente lo asume como un órgano vital de asesoramiento, y si estará dispuesto a cumplir hasta sus últimas consecuencias el apoyo a las misiones encomendadas para disuadir y enfrentarse a las amenazas que hoy tiene España.
Con frecuencia el remedio en las organizaciones está dentro de la casa y no fuera. Si se ha tardado tanto tiempo en elegir candidato, ya que en 2014 parece que no lo había y en 2019 llegamos a la misma situación, la interinidad podría resolverse. El CNI tiene tres almas: la militar, la policial y la civil, y quizás haya llegado el momento de confiar en sus equipos. La experiencia en planeamiento y estrategia en órganos de dirección, como es el de Esteban López, sería un perfil óptimo para la dirección. Su caso recuerda al de Stella Rimington, directora general del MI5 británico, cuyas memorias, tituladas Open Secret, se recomiendan leer para comprender la reacción de los políticos cuando tienen que abordar temas de Inteligencia.
Conviene no politizar la inteligencia porque significa viciarla, y uno de los mejores parámetros para medir una democracia es, precisamente, la situación de estos servicios: transparencia, cumplimiento de la ley, regulación, financiación, etc. En caso de buscar un nuevo Secretario de Estado Director (SED-CNI), el perfil debería cumplir tres condiciones. Primero, que su nombramiento no coincida con periodos electorales, para fortalecer la visión de Estado, para desajustar intereses de partido y que sea más fácil llegar a su validación por parte de Gobierno y oposición; segundo, que tenga experiencia internacional, que sepa idiomas, que haya recorrido mundo; y tercero, que en lo posible coincida con el final de su actividad profesional, para evitar incompatibilidades tras el mandato.
Un contrato de interinidad cubre temporalmente un puesto de trabajo durante un proceso de selección y se le conoce también como contrato por sustitución porque se suple temporalmente la baja del titular de la plaza. Los servicios de inteligencia no merecen interinidad ni temporalidad. Conviene un mayor acercamiento entre sociedad civil, política y comunidad de inteligencia. No basta dar conferencias, organizar cursos o acudir a la Comisión de Secretos Oficiales. Es necesario hablar de amenazas, asunto incómodo para una cultura política instalada en el Estado del Bienestar y en el cortoplacismo electoral.
No es fácil hablar del tema de los servicios de inteligencia porque enseguida surgen sospechas, conspiraciones y una amplia colección de disparates, y se deja de lado el valioso trabajo que realizan estos hombres y mujeres. Nuestra intención es que esta importante herramienta del Estado sea comprendida y valorada. Por esa razón, la situación de interinidad no puede volver a repetirse.
Gabriel Cortina, diplomado en Altos Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN)
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Foto: Ministerio de Defensa